Paraguay busca fortalecer su política exterior para ingresar a nuevos mercados

Uno de los puntos neurálgicos en este escenario tiene que ver con la Hidrovía Paraguay-Paraná, un tema que afecta mucho al comercio internacional y que viene siendo muy debatido con relación al costo del flete impuesto por la Argentina por surcar las aguas en su territorio.

“Nuestra intención es que podamos, en el marco de la Hidrovía Paraguay-Paraná, tener una visión compartida del peaje. Ninguna empresa tiene inconveniente de pagar el peaje siempre y cuando haya prestación de servicios, eso lo consultamos permanentemente con el sector privado. Cada una de las acciones que estamos encarando sobre este tema lo hacemos consultando con el sector privado”.

Esta es la postura del ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Rubén Ramírez Lezcano, que participó de una reunión con la miembros de la comisión directiva y socios de la Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP) para abordar diversos temas que tienen que ver con la política exterior de nuestro país, así como el comercio internacional.

Unificar criterios

Lezcano explicó que, con relación a la Hidrovía, se estableció que ninguna intervención debe ser aislada por parte de los países miembros del tratado y apuntó a que lo importante es tener una visión compartida. “Una de nuestras inspiraciones es el Río Missisippi, que mueve 600 millones de toneladas de carga al año, nosotros estamos alrededor de los 46 millones, es decir, el potencial que tiene la Hidrovía Paraguay-Paraná es grande.

Otro tema es el impacto ambiental y la forma en que se intervenga sobre este aspecto. Si de Brasil y de Argentina eso llega de una manera diferente y de nosotros una forma distinta, vamos a tener intervenciones asimétricas”, sostuvo.

El secretario de Estado reconoció que “hay muchos cuellos de botella”, en referencia a la burocracia de documentaciones por parte de las entidades nacionales y que “la resistencia es enorme” en cuanto a cambios que se pretenden introducir para agilizar los procesos administrativos.

“Identificamos que Puertos está cobrando una tasa por la que no presta ningún servicio, pero nosotros le exigimos a Argentina que estamos dispuestos a pagar un arancel siempre que haya una prestación de servicio. Desarmar eso es terrible y está por decreto. Son desafíos importantes, pero se van desarmando.

El mismo presidente (Santiago Peña) dirige las reuniones sobre estos sistemas de desburocratizaciones. Allí hay todavía alrededor de 30 puntos por desarmar, eso lo estamos viendo con el Equipo Económico”, explicó.

Negociaciones

Sobre los objetivos de la política internacional del gobierno paraguayo, mencionó que entre ellos se encuentra resolver “problemas claves” y consideró que el conflicto por los aranceles de la Hidrovía es un tema prioritario en el que están trabajando para tratar de solucionarlo.

“Antes del 15 de agosto, en la etapa de transición, nos encontramos con 14 barcazas incautadas en Argentina. El día que asumí había alrededor de 8, porque las demás habían pagado la multa, y pudimos resolver finalmente ese conflicto que nos llevó inclusive a un enfrentamiento entre nuestro gobierno y el ministro de Economía y candidato presidencial por entonces, Sergio Massa”, recordó el Canciller.

Ramírez destacó que se resolvió ese inconveniente, quedando ciertas pautas o asuntos a ser analizados de forma bilateral con el país vecino. “La primera pauta es la eliminación de las medidas judiciales adoptadas y que Argentina tiene que determinar de qué manera administrativamente puede resolver las facturaciones de pago de servicios que habían propuesto, eso lo estamos negociando entre los gobiernos con participación del sector privado paraguayo para que con ellos, con conocimiento y asesoría jurídica, se pueda llegar a acuerdos que sean factibles”, refirió.

Según el ministro, otro elemento que se dejó en claro es que existe una predisposición a pagar el arancel por la Hidrovía Paraguay-Paraná, “siempre y cuando haya una prestación de servicios y que acordemos los cinco países como lo establece el Tratado de la Hidrovía”.

“Estamos en una lucha donde Argentina le concedió a Uruguay para que no sea tan activo en este tema, le concedió la liberación de la utilización de puertos en el canal, allí también hay elementos que son claves”, profundizó.

El canciller nacional explicó que el escenario mundial se encuentra actualmente con tensiones geopolíticas importantes, donde las principales potencias están enfrentadas y un grupo de países, dentro de esos conflictos, plantea un nuevo orden global.

“Hay otro grupo de países que está entendiendo de qué manera van a actuar en ese escenario, por lo tanto, las tensiones geopolíticas producen importantes déficits fiscales, lo que genera inestabilidad en su desarrollo. Hay en estos momentos 52 enfrentamientos bélicos, siendo los más importantes Gaza-Israel, Rusia-Ucrania, vemos también la amenaza China-Taiwán, las acciones de Corea del Sur. Nuestra posición geopolítica, en ese sentido, es clave para poder ser un lugar destinado a la paz y tranquilidad para el desarrollo”, expuso.

Igualmente, advirtió que el mercado económico global está ante un escenario de volatilidad en los mercados agrícolas, minerales, tecnológicos y energéticos. Observó que hay una serie de amenazas biológicas y que el sistema sanitario de nuestro país debe estar preparado para afrontarlas. “Hay un riesgo ambiental, estamos trabajando enormemente para contrarrestar los efectos de la sequía, que impactó a inicios de este año y puede tener un efecto superior en las inversiones, por eso hemos firmado una serie de acuerdos con los países vecinos para tener acceso a hidroaviones y tomar acciones con relación a todo lo que tenga que ver con la navegación. En cuanto al Río Paraná, hay inversiones importantes en dragado”, informó.

Un punto que merece ser advertido es el mal momento diplomático que hay entre dos países vecinos, lo que puede afectar las relaciones comerciales de la región, manifestó. “Vivimos entre dos elefantes y, cuando los elefantes se pelean, el pasto sufre. Hoy contamos con dos países vecinos que están enfrentados, como Argentina y Brasil, por cuestiones ideológicas. Contamos con un Mercosur que necesita ser mucho más vibrante para atraer inversiones”, afirmó.

Alianzas comerciales

Nuestro país necesita aprovechar su visión geopolítica para catapultar su desarrollo y, para ello, cuenta con aliados importantes como Estados Unidos, Israel, Taiwán y Mercosur. “Estos aliados nos están dando la oportunidad para que Paraguay sea el anfitrión de la mayor cantidad de inversiones en tecnología. Estamos hablando de la formación de 1.700 ingenieros paraguayos, 400 de ellos están en el tercer año. Los primeros ingenieros egresados el año pasado en Taiwán, que son 8, están trabajando en una industria que se instalará próximamente en Paraguay, en el rubro de la producción de buses eléctricos. Se cerró un acuerdo con Marcopolo, una marca brasileña de buses, hasta tanto traigan toda la tecnología para producir las unidades acá”, destacó el titular de la entidad estatal.

“Tenemos que hacer que Paraguay se conozca y se conozca bien. Definimos con el presidente algunos mercados objetivos, empezamos por nuestra región, luego pasamos a Estados Unidos, abrimos Medio Oriente y estamos trabajando fuertemente con el Japón. Hay cuatro industrias japonesas instaladas en Paraguay de altísima tecnología, visitamos una de sus plantas y es impresionante lo que tienen allá y lo que quieren desarrollar acá. Son desafíos claves para nuestra política global”, añadió Ramírez.

Inversiones

De acuerdo al secretario de Estado, en el mundo hay presidentes de países pequeños como el nuestro que empiezan a ser más activos en materia de viajes al exterior, lo cual nos da una oportunidad extraordinaria para concretar acuerdos comerciales.

“Se van a ver los resultados en las inversiones en corto plazo, algunas ya están instaladas. Los dueños de esas inversiones nos piden que, apenas terminen su proceso, ellos los van a anunciar. El sector privado está con un importante grado de inversión. Uno de los proyectos más emblemáticos acaba de hacer una capitalización de 380 millones de dólares con inversores institucionales muy importantes. Ellos van a invertir 3.000 millones de dólares inicialmente, pero en un período de diez años estiman llegar a US$ 40.000 millones, están plantando 170.000 árboles, cuentan con 1.700 empleados en estos momentos y con un impacto de 6.000 personas con empleo de forma indirecta”, resaltó.

“Lo más importante es que Paraguay va a ser uno de los productores más importantes de celulosa y a esa industria se está apostando fuertemente. Allí es donde se está trabajando para poder lograr concretar inversiones que impliquen consumo energético y eso se pueda transformar en productos de alto valor agregado”, acotó Ramírez.

En el aspecto económico, indicó que la base es el trabajo interno que hace el gobierno, para contar con una economía previsible y sostenible, para que nuestros indicadores alienten la actividad económica, el consumo y la producción.

“En materia de negociaciones económicas internacionales, contamos con negociaciones con Emiratos Árabes Unidos, con inversiones muy importantes, como el nuevo aeropuerto, hidrovía y un proyecto ferroviario desde Sao Paulo, pasando por el corredor Bioceánico, hasta Iquique.

El trabajo que falta es Campo Grande-Puerto Mortinho, del lado brasileño, y lo que sería para nosotros Carmelo Peralta-Misión La Paz. Haría falta una inversión de US$ 1.300 millones para culminar este proyecto y hay varias empresas interesadas. Esa inversión es demasiado importante porque va a darnos otra alternativa de conectividad y va a permitir el flujo de personas y cargas hacia Matto Grosso do Sul, una de las grandes potencias económicas de Brasil. Todas esas negociaciones forman parte de nuestra política bilateral con Brasil”, reveló.