Cómo impacta la inteligencia artificial

Desde los primeros días del año, comenzó a resonar con un eco más intenso todo lo referente a la Inteligencia Artificial. De ser una aplicación con la que divertirse y crear distintos avatares e imágenes para el perfil de redes sociales, las empresas de pronto se encontraron con oportunidades de optimizar la escritura de textos, la conversión de textos a audios, generación de videos y más.

Antes de remontar esta ola, muchos profesionales miraron con recelo a este nuevo invitado del maletín de herramientas para la estrategia y gestión de marcas. Porque, ¿qué significaría esto para ciertos trabajos? ¿De qué “serviría” un copywriter en la empresa, si una página web entrega un copy en menos de 1 minuto? ¿Qué ocurriría con los diseñadores, si al digitar unas indicaciones puede aparecer una gráfica que responde a lo solicitado?

Definitivamente, es un tema cuya moralidad aún debe atenderse con cuidado, pues sí es factible que no todas las plataformas se estén desempeñando con el rigor del respeto a los derechos de autor.

Sin embargo, también es verdad que pueden existir opciones o alternativas serias que pueden convertirse en una ayuda cierta para los profesionales – que descubrirán que la IA no es una amenaza, sino una herramienta para potenciar su gestión – y, especialmente, como nos referiremos a continuación, para las marcas y los departamentos de marketing.

Una ventaja competitiva

Sí, no podemos hablar de una posibilidad futura: la IA ya existe, es una herramienta disponible para las empresas y estas ya la están aplicando. En un escenario donde el mercado evoluciona vertiginosamente, la tecnología ayuda a procesar altos volúmenes de información, además de posibilitar una mejor eficiencia de procesos comerciales y la consecuente experiencia del consumidor.

¿Qué tiene que ver la IA con el marketing?

La gestión de marcas requiere herramientas que le permitan entender mejor a su público objetivo. Por otro lado, también requieren producir contenido más relevante. La IA puede ayudar al departamento de marketing en ambas tareas.

Se prevé que la IA desempeñará un papel cada vez más importante en la creación de marcas, en los próximos años. Esto se debe a que se podrán realizar campañas publicitarias más personalizadas, a partir de la optimización de esta tecnología. La fidelización tan anhelada por las marcas será solo una consecuencia de un trabajo previo de creatividad e innovación tecnológica.

La IA seguirá impulsando la publicidad digital y – como ya hablamos del aspecto predictivo de su uso – podrá identificar grupos de usuarios según sus intereses y actividades.
Como la IA es la herramienta que recopila datos por parte de bots digitales y una curva de aprendizaje que permite segmentar y procesar la información, es posible identificar las tendencias.

Predicción del comportamiento del consumidor

No se puede actuar sin información. La eficiencia de una acción depende de una óptima investigación. Claro que, hasta ahora, eso se limitaba a lo que se podía obtener de manera “forense” – posterior a la acción del consumidor – o a partir de datos proporcionados por los mismos consumidores, mediante encuestas, focus group, etc. Pero actualmente, si bien el estudio del pasado y el presente conservan su importancia, se suma la predicción del futuro. Y la IA puede desempeñar un rol muy útil en este aspecto, prediciendo el comportamiento de compra del público objetivo y sus actividades futuras. No hace falta recalcar – pues destaca por sí – lo importante que esta precisión será para la conceptualización de estrategias y campañas publicitarias personalizadas.

• Analizar e identificar raíces de problemas en distintos embudos de marketing y ventas para resolverlos de manera eficaz.
• Mejorar el desarrollo de productos y servicios.
• Comprender de manera integral las necesidades de los clientes y lo que les atrae, para entregarlo.
• Generar contenido personalizado, específico y relevante, valorado tanto por el usuario como por los buscadores de Google (SEO).

En síntesis, la IA puede influir en la consecución de mejores resultados – no solo en el departamento de marketing de cada compañía -, impactando en el desarrollo de los negocios y, desde ellos, ¿por qué sería ambicioso pensar en la sociedad?