Convertir likes en ventas
Las redes sociales todavía son un mundo donde las empresas se encuentran incursionando recientemente. En sus inicios la batalla fue por conseguir una buena audiencia y contar con muchos likes o seguidores para llevar a la empresa más cerca de sus consumidores y posibles clientes. Pero, la pregunta hoy en día se ha convertido en cómo cambiar esos números de likes en ventas.
Muchas veces, las publicaciones en las redes sociales no ofrecen resultados visibles. De acuerdo con especialistas de marketing en la plataforma Entrepreneur, no basta solamente con atraer tráfico a la “fanpage” o tener muchos “likes”.
Las interacciones que se producen en las redes sociales, no es más que una forma de encontrar clientes potenciales, ya que reportan quiénes son las personas interesadas en tus servicios. Por un lado, es interesante ya que el análisis de aquellas interacciones nutre a los encargados de marketing para saber qué enfoque podrían tener sus campañas para tener un mayor alcance en cierto grupo determinado de personas que interactúan con la marca.
Pero, ¿cómo se puede transformar aquellas simples interacciones en ventas? Ana González, fundadora de la agencia de marketing digital Levadura, dijo durante Zoholics 2017 (una conferencia organizada por la empresa hindú Zoho) que para monetizar con redes sociales y transformar los “likes” en una venta, es esencial convertir a los fans en amigos.
En el mundo de la publicidad, rápidamente los porcentajes de inversión se encuentran transfiriendo hacia las redes sociales en todo el mundo, ya que las empresas buscan captar la atención de su target en redes sociales, aunque muchas veces se equivocan en la forma en que se comunican. Es decir, aunque las plataformas de redes sociales son clave para encontrar clientes potenciales y conectar con los clientes que ya forman parte de la red de la marca, no es un buen lugar para vender directamente ya que, al ser una red social, el motivo principal es socializar.
González explicó que, más allá de los negocios, las empresas deben aprender a traducir la interacción que tienen sus páginas en las diferentes redes sociales en ventas. Esto significa seguir el “abc de la persuasión”.
Hay que entender hasta dónde llega el marketing y dónde comienzan las ventas.
Primeramente, recomienda que no se debe hacer marketing para vender. Con esta frase explica que hay que entender hasta dónde llega el marketing y dónde comienzan las ventas. La manera correcta de hacerlo es estudiando primeramente a la audiencia, enamorarla, darle un seguimiento a la relación que se crea con los clientes y medir el impacto durante el tiempo de la campaña y a largo plazo. Un buen ejemplo fue la campaña realizada por su equipo de Levadura, en donde preguntaron a las mujeres en las redes sociales qué llevaban dentro de la cartera normalmente, denominándola “Mexicanas a través de su bolso”. Por más simple, relacionable y divertido que pueda parecer para los consumidores, el único fin de la campaña era conocer los hábitos de consumo que dan informaciones del consumidor y qué oportunidades se pueden crear para conectar con aquel target. Este paso se constituye como la primera letra del abecedario de la persuasión y busca solamente posicionarse en la mente del consumidor.
El siguiente paso consiste en realizar un plan que contenga aspectos como el presupuesto (también se puede realizar de forma orgánica), la definición de la audiencia y la temporalidad de los mensajes.
Para realizar este paso, se debe definir cuáles son los intereses de la audiencia y crear contenido con temas que puedan hacer clic con el target, en otras palabas, crear contenido “ad hoc” o con un propósito específico. Luego hay que planificar qué temporalidad tendrán los mensajes que estarán en cada publicación y cuáles serán los horarios en que serán publicados. De acuerdo con el blog de marketing digital e Inbound Marketing denominado “The digital Marketing Lab” de MarketiNet, las mejores horas para publicar en las redes sociales varían por el tipo de plataforma. El mejor momento para publicar en Facebook es el miércoles a las 15hs. Otros horarios incluyen a los sábados y domingos de 12 a 13hs. y a los jueves y viernes de 13 a 16hs. Normalmente, la participación es más alta los jueves y viernes y el mayor porcentaje de clic es entre semana de 13 a 16hs. En Twitter, lo mejores horarios van entre los lunes a viernes de 12 a 14 hs. y a las 17hs para las empresas B2B y el porcentaje de clics es más alto los días miércoles. Por el otro lado, las empresas B2C tienen un mayor porcentaje de clics los miércoles y los fines de semana. Instagram es la otra red social más utilizada en los dispositivos móviles actualmente. El mejor momento para publicar en Instagram son los lunes y jueves a cualquier hora excepto entre las 15 y 16hs. Las publicaciones de video tienden a funcionar mejor a las 8 o a las 21hs.
El mejor momento para publicar en Facebook es el miércoles a las 15hs.
Durante el mencionado paso, González enfatiza que el contenido debe ser para generar engagement y que incluso, se debe considerar que el diseño del mensaje sea multicanal.
El tercer paso, se trata de generar conversación. Se debe fomentar una conversación positiva para lograr una venta, sobre todo en un entorno donde la mayoría de los comentarios o recomendaciones que se encuentran en las redes sociales sobre marcas influyen en la opinión de los consumidores, sobre todo ya que casi a la mitad de los consumidores admite que la publicidad en redes sociales le ha ayudado a tomar la decisión de compra.
La especialista aconseja a las personas que manejan las redes sociales de las empresas a que se hagan amigos de sus consumidores a través de un trato cordial, optimista y utilizando los términos que sus consumidores utilizan, ya que “es más fácil que les compres a tus amigos porque te caen bien”. Sobre este tema, es importante tomarlo con mucha consideración ya que hoy en día, las personas pueden construir o destruir una marca en segundos a través de las redes sociales, convirtiendo el “word of mouth” a “word of mouse”.
Las personas pueden construir o destruir una marca en segundos a través de las redes sociales, convirtiendo el “word of mouth” a “word of mouse”.
En las redes sociales, no se trata de publicar constantemente, se trata de hacerlo con estrategia. En realidad, lo que determinará si los consumidores compran un producto o servicio será la calidad de la empresa o marca en la red social y si alcanzan al target que realmente le interesa lo que la empresa o marca ofrece.